Mientras leía las estadísticas de un estudio publicado por la Asociación de Viajes de Estados Unidos, no podía dejar de pensar en una amiga que angustiada me contó que tuvo un viaje para el olvido, con su pareja ahora están separados, tenían muchos problemas antes del viaje y lo vieron como una última oportunidad… no les resultó.
Es que una escapada romántica no hace milagros, pero creo que definitivamente ayuda salir de los lugares frecuentes y entregarse a disfrutar en pareja. Cuando estamos fuera de casa hay menos razones o «excusas» para no darnos tiempo y la sensibilidad se agudiza por las nuevas experiencias.
La posibilidad que dan los viajes de desconectarse permiten a muchas parejas tener más intimidad, romance y mejorar su vida sexual. En concordancia, el mencionado estudio señala que un 77% de las parejas que viajan juntas dicen tener una buena vida sexual, de ellos el 28% considera que ésta ha mejorado notablemente después de viajar y un 40% han declarado que la mejora se ha convertido en una situación permanente.
Buscando más antecedentes encontré que la encuesta telefónica de la firma Edge Research también señala que el 63% de los encuestados prefieren una escapada de fin de semana a otro regalo cuando se trata de despertar el romanticismo. Quizás viajar resulta ser un nutriente para la sexualidad y efectivo bálsamo a la rutina que condena a muchas parejas.
No es de extrañar entonces que los viajes de parejas hayan aumentado y que ya no se espera los tradicionales meses de vacaciones, en cualquier época es un buen momento para escaparse con tu compañer@, ¿Necesitas más razones para intentarlo?