Aunque el tiempo parece haberse detenido, muchas cosas han pasado en los últimos ocho meses. De pronto nos vimos forzados a distanciarnos de todos y confinarnos en casa, vestir mascarillas y escudos faciales y utilizar compulsivamente toda clase de desinfectantes. No más clases, no más idas a la oficina o al lugar de trabajo, calles vacías.
Estar en casa obligadamente con la media naranja suena maravilloso y prometedor… En teoría. Todo muy idílico cuando la causa no es una pandemia. Así pronto los efectos de estar recluidos (o bien, separados) por períodos prolongados de tiempo, compartiendo el mismo espacio, comienzan a hacerse notar y pasar factura en las dinámicas familiares y las relaciones de pareja. Lentamente esas pequeñas diferencias, costumbres y manías, que antes nos parecían adorables, pueden volverse absolutamente detestables con el transcurso de los días. Si a eso le sumamos la incertidumbre, el estrés, la ansiedad de los niños, en los casos de las familias, que no logran entender por qué no pueden realizar sus actividades habituales ni salir, todo puede tornarse en un espiral emocional muy difícil de lidiar y que a menudo genera discusiones y conflictos.
Si bien, estamos algo más relajados y tenemos más libertad para salir que hace algunos meses atrás, aun no tenemos certezas ni soluciones para la situación actual. Todavía nos quedan obstáculos que enfrentar y debemos protegernos quedándonos en casa y evitando lugares públicos tanto como sea posible. Mientras eso sucede, existen algunas pautas, que podemos seguir para mantener la armonía en el hogar y mejorar las relaciones de pareja:
Respetar los espacios del otro
Respetar los espacios individuales se recomienda siempre, pero en cuarentena se vuelve una necesidad. Es saludable delimitar al menos un espacio dentro del hogar, aunque sea pequeño, al cual retirarse, sin ser molestados, en aquellos momentos de introspección o desacuerdos. Una suerte de oasis personal que nos permita relajarnos y contar hasta diez o simplemente recargarnos de energía y darnos un respiro. Es imprescindible que todos los habitantes de la casa acepten y respeten esos espacios como tal.
Tomar aire fresco
Salir al aire libre a caminar, o pasear a nuestra mascota, resguardando las medidas necesarias, es muy aconsejable. El cambio de aire y de escenario nos dará energía y también nos proporciona un medio de escape y relajo cuando las cosas se pongan un poco tensas. Una pequeña caminata nos regala tiempo y espacio para reflexionar y poner las cosas en perspectiva.
Hacer planes juntos
Hacer juntos una lista de planes a corto y largo plazo, tratando en enfocarse en lo positivo, nos ayudará a evitar incertidumbres y evadir cualquier miedo o sentimiento negativo que podamos estar experimentando producto de la situación actual, ¿Qué es lo primero que haremos cuando la pandemia se acabe? ¿A quien visitaremos? ¿ Cuál será el destino de nuestra próxima escapada romántica? ¿Qué esperamos para los próximos tres años? Las parejas que sueñan juntas, permanecen juntas.
Momentos mágicos
Regalarse un tiempo de pareja es vital y tener una noche romántica es absolutamente posible, aún en estas circunstancias. ¿Qué es lo que solían hacer en una “cita” antes de la cuarentena?, ¿Salir al cine? ¿Salir a cenar?, ¿Visitar nuevos lugares en una Escapada Romántica?, ¿Excursiones en bicicleta?, ¿Noche de películas en casa? Con un poco de creatividad todo eso todavía es posible, o adaptarlo lo más posible a nuestra situación actual, lo importante es tener la disposición y darse el espacio, fijar un día solo para los dos en pareja, planear las actividades de antemano y preparar uno que otro detallito. Gracias a la tecnología y al delivery, no sólo las tiendas de todo tipo son accesibles, también podemos disfrutar hasta de un concierto o cualquier otro tipo de espectáculo en línea incluso desde el jardín de la casa. Apaguen las luces, enciendan una vela aromática y echen a volar la imaginación.
La comunicación es clave
¿Cuál es el secreto para una relación de pareja feliz y duradera? Comunicación es la clave. Este es el momento para darse el tiempo de hablar y escuchar verdaderamente a la pareja. Dejen momentos de la semana para vaciar todos sus pensamientos e inquietudes y expresar sus necesidades. Compartir los cuestionamientos y angustias fortalece la relación, evita sorpresas y resentimientos y nos hace estar conectados y en la misma sintonía.
Los pequeños detalles cuentan. Una palabra cariñosa, un halago, un reconocimiento por la labor cotidiana realizada fortalecen e influyen tremendamente en la dinámica de la pareja.
Enfoque positivo
Finalmente, para bien o para mal, la pandemia del Covid -19 es un hito histórico que marcará a esta generación. Si bien hay mucho por lo que ser cauto y preocuparse en cuidar de uno mismo y de los demás, es necesario dar un enfoque positivo y tratar de ver el lado favorable. Es una cuarentena, pero también es una experiencia memorable y única que podremos contar a las generaciones que vienen. Disfruten de este tiempo juntos, en pareja, antes de que la rutina del día a día y el trabajo, fuera de casa, vuelvan a hacerse presentes. Piensen en todas las veces que en el pasado desearon que, por un momento, el mundo se detuviera y pudieras pasar tiempo en pareja o con la familia, disfrutar, conversar, compartir. Este es el momento.